El protocolo de investigación es
un documento donde se describe de manera completa y detallada el proceso de una
investigación antes de realizarlo; comprende la metodología científica,
el planteamiento y análisis estadístico, la administración de los recursos y
determina los aspectos éticos del estudio.
Elementos del protocolo de
investigación:
TITULO. El título de un trabajo de
investigación debe ser aquel que describa o indique directamente el propósito
del estudio; debe ser atractivo, breve, informativo, preciso y cierto, de tal
forma que sea fácil colocarlo como referencia en los índices bibliográficos.
Existen revistas científicas que
solo aceptan títulos construidos con un máximo de 60 dígitos y otras los
aceptan con 90 y más. No debe ser demasiado corto ni muy largo, es preciso
consultar “Las instrucciones para los autores”, que señala la revista en la que
se pretenden publicar los resultados de la investigación.
El título es una parte muy
importante del protocolo de investigación, es la frase que enuncia un trabajo científico
e invita a su lectura, revela los objetivos y compromisos del estudio y da una
idea de los resultados. Al principio puede ser provisional.
Vale la pena destacar que el
título será leído en múltiples ocasiones, en cambio, el contenido del artículo
lo consultaran poco, es por eso necesario construir el título con cuidado y
esmero, que no tenga defectos o errores de comprensión y sintaxis, que los
términos que utilicen sean exactos y propios.
Un título impreciso, largo y
dudoso, revela inmadurez del autor, pudiendo causar desinterés y confusión en
el lector.
JUSTIFICACIÓN. Es la explicación
amplia, detallada y precisa de las razones que fundamentan le ejecución de una
investigación. Describe la situación que motiva el estudio, analiza el
comportamiento de los elementos o factores que condicionan la presencia del
fenómeno y en su caso considera la repercusión económico social del problema,
se basa en una buena bibliografía.
Cuando el Protocolo de
Investigación se pone a consideración de las instituciones que brindan apoyo
económico o material a la investigación, se aconseja justificar el estudio en
un lenguaje llano, pero convincente; ya que en la mayoría de los casos, las
personas que leerán el escrito y aprobarán la aportación de dichos recursos tienen profesiones
distintas a la del autor, y en ocasiones la terminología técnica no la
comprenden del todo.
La Investigación Científica puede
justificarse con base a uno o varios de los siguientes aspectos:
- Magnitud y trascendencia del problema.
- Utilidad de los resultados.
- Factibilidad por la existencia de tecnología para la realización del estudio.
- Por ratificación o rectificación de conocimientos previos por el desarrollo de nuevas técnicas para la medición de las variables del objeto o fenómeno de estudio.
- Ausencia de conocimientos.
Sugiero que la justificación se
incluya después del título, por ser este el capítulo que servirá de base para
la obtención del apoyo necesario para la realización y un buen desenvolvimiento
de la investigación.
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